Se refiere al período de aproximadamente el siglo IV a.C. al siglo IV d.C. durante el que floreció el reino de Nabatea localizado al noroeste de Arabia. El estilo del período es conocido por su carácter ecléctico, que combina motivos helénicos, romanos, y orientales y puede distinguirse claramente en las fachadas de tumbas de roca cortada en Petra, la capital del reino.