Se refiere al estilo predominantemente de escultura que apareció por primera vez en una exhibición de arte en 1966. Bautizado por la crítica Lucy Lippard, el estilo se caracteriza por un rechazo del formalismo Minimalista, con un énfasis en la forma experimental y en el uso de materiales suaves como caucho, vinilo, plástico y resina de poliéster.