Refiérase al movimiento mexicano-americano en los Estados Unidos durante los siglos XIX y XX, caracterizados por discusiones artísticas y políticas que trata los problemas sociales relevantes a las comunidades mexicanas y Chicanas. El movimiento es conducido por un redescubrimiento de estilos indígenas pre-Colombinos, el desarrollo de la pintura mexicana del mural, y por controversias en los estudios culturales que rodean al multiculturalismo e identidades étnicas. El movimiento también revela elementos fuertes del regionalismo, promoviendo formas y técnicas vernáculas para exponer la iconografía tradicional y contemporánea.