Se refiere al período en historia y estilo de arte que se desarrolló cuando Roma fue gobernada por la República, desde su fundación en 509 a.C hasta el final de la Batalla de Actium en 31 a.C o el establecimiento formal del Imperio en 27 a.C. El arte producido durante este período refleja el poder político, glorias y los antepasados distinguidos de las familias gobernantes, lo que se evidencia en muchos retratos y relieves históricos. El estilo se caracteriza por la influencia del arte griego Clásico y un énfasis en el realismo extremo.
