Se refiere al perÃodo desde aproximadamente el 1938 al 1756 a.C. El perÃodo se caracteriza por un renacimiento de los estilos artÃsticos del Imperio Antiguo y una producción artÃstica de alta calidad vistas particularmente en la construcción de pirámides y templos mortuorios, la introducción de retrato en escultura real y un alto nivel de habilidad técnica alcanzado en las artes menores.